10 recomendaciones que nos hacen la vida más fácil

 

Cada persona es un mundo, es muy difícil dar tips o recomendaciones que sirvan para todos. Es importante que trabajemos en nuestro autoconocimiento para reconocer con rapidez qué tipo de tareas son las que necesitamos incorporar en nuestra vida. No se trata de hacer y hacer, se trata de hacer lo que necesitamos, lo que nos viene bien, lo que nos empuja a mejorar. 

 

A continuación, te dejo 10 recomendaciones para evaluar si las estamos realizando, si podemos mejorar lo que hacemos o si podemos incorporar alguna tarea o hábito nuevo en nuestra vida.

 

Al igual que cada persona es diferente, cada momento en nuestras vidas también es diferente. No siempre necesitamos lo mismo. Necesitamos revaluar cada etapa y adaptar los hábitos y recomendaciones. Los tips pretenden hacerte reflexionar sobre qué es lo que necesitas ahora mismo en cada uno de esos diez aspectos y darte ideas de posibles mejoras:

 

1. Apunta, saca de la cabeza, planifica, haz listas. Es importante liberar espacio mental, ya tenemos bastantes cosas en la cabeza, nos viene bien volcar la información en el papel apuntando las cosas que tenemos pendientes, las citas médicas, las fechas importantes, las listas de tareas, de compras... De esa manera, dejamos más libre nuestra cabeza y aseguramos que no se nos olviden las cosas.

 

2. Encuentra un momento para ti todos los días, una actividad agradable o de autocuidado diaria. Puedes hacer una lista de esas cosas que te relajan, te reconfortan y te calman y asegúrate de planificar alguna de esas actividades todos los días. Necesitamos ese momento de desconexión y esa sensación de que nos cuidamos, independientemente de cómo haya sido nuestro día. A veces creemos que no tenemos tiempo, pero siempre hay tiempo para una actividad de diez minutos. Nada más levantarte puedes pensar en cuál será tu momento agradable ese día o apuntarlo en la agenda la noche anterior.

 

3. Lee todos los días. ¡Qué importante aprender todos los días algo nuevo! Nuestro cerebro sigue generando nuevas neuronas hasta que morimos y una de las mejores maneras de aprender es mediante la lectura. Leer es uno de los mejores hábitos que podemos incorporar a nuestra vida, sea como aprendizaje, sea como actividad agradable. Realízalo un poco todos los días, no se trata de darnos un gran atracón una vez al mes, sino de mantener el hábito constante acompañándonos diariamente. 

 

4. Una rutina relajante antes de dormir. Dormir es un acto de autocuidado no negociable porque la falta de sueño tiene grandes consecuencias. Es importante crear una rutina una hora antes de dormir que nos prepare para el sueño. Olvídate del teléfono, toma una infusión, lee, escucha música relajante, escribe, date un baño relajante, haz unos estiramientos o yoga, realiza una meditación, una visualización... ¿Cuáles son esas actividades que te vienen bien a ti antes de dormir? ¿Cuál es el primer cambio que puedes realizar?

 

5. Ejercicio diario. Planifica momentos para hacer ejercicio. La clave está en encontrar lo que nos va bien, lo que importa es que lo hagamos y lo disfrutemos. Al final, el ejercicio físico es una de nuestras mejores terapias para la ansiedad.

 

6. En contacto con la naturaleza. Intentar acercarte a la naturaleza lo máximo que puedas para disfrutar del silencio y para encontrarte contigo mismo. Planifica tu próximo paseo o tu próxima actividad al aire libre. ¿De qué manera disfrutas tú de la naturaleza? ¿Un paseo, leer en el parque, una ruta de montaña, sentarte en silencio, escalar, cuidar tus plantas o jardín?

 

7. Entorno que suma, toma decisiones en tus relaciones. Aprende a saber rodearte bien, las personas pueden ser motor de cambio o motivación, o, por el contrario, pueden contaminar y chupar tu energía. ¿Quiénes son esas personas que son un obstáculo en tu vida? Trabaja cada semana para alejarte un poco más de esas personas tóxicas. No podrás conectar con personas interesantes hasta que desconectes de quien no te hace bien.

 

8. Reduce la queja y la crítica. La queja solo transmite negatividad, no nos aporta nada, es un desgaste de energía. ¿Por qué perdemos tanto tiempo quejándonos? Pon atención a cuántas veces criticas o te quejas e intenta darle la vuelta. ¿Hay algo que tú puedas cambiar de esa situación? Pues hazlo. ¿Simplemente tienes que aceptarlo? Pues deja el tema. ¿Puedes extraer algún aprendizaje? Pues da las gracias por ello. Puedes buscar algún método para hacerte consciente de la cantidad de veces que hacemos esos comentarios negativos, por ejemplo, cada vez que te pilles diciendo una crítica queja puedes meter cinco euros en un bote. 

 

9. Da cariño, abraza. El cariño es mágico, reconforta, calma y tranquiliza. No hay mucho más que explicar ni añadir... Necesitamos amor en nuestras vidas. ¿Estás expresando cariño a las personas que quieres?

 

10. Ayuda a los demás. El altruismo es una fuente de bienestar y felicidad. Es imposible hacer un acto de generosidad sin sentirte bien contigo mismo. Cuando consigues que alguien mejore su bienestar, inmediatamente mejora el tuyo. ¿Puedes ofrecer ayuda en tu entorno que te aporte a ti y a los demás? ¿Hay algún voluntariado que te interese?

 

 

¿Encuentras alguna idea para realizar mejoras en tu vida?

¿Por dónde crees que podrías empezar?

¿Has encontrado cosas que ya haces en tu día a día y que te sientes orgulloso de realizar?

 

 

 

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